lunes, 21 de diciembre de 2015

¿Cuándo publicamos?

Si lo hacemos cada semana como acostumbran varios medios, tendremos algunos problemas: a veces el trabajo complica las cosas; la necesidad de tener una idea semanal y poder plasmarla en una cuartilla sin falta. Puede ser que no tengamos tiempo para desarrollar la idea o que ésta brille por su ausencia. Ahora, que una cuartilla quincenal parece algo flojo, no se trata de dejar al amable lector esperando tanto tiempo. Así que pensemos en un lapso intermedio. Díez días suena bien: entre los dos anteriores y fácil de recordar. ¿Qué te parece?
Pero, ¿en qué días? El décimo, vigésimo y trigésimo pueden ser una buena opción, pero no me gustan esos números: demasiado simples, todos son múltiplos de diez, ninguno primo. Los días dos, doce y veintidós pueden ser opción: al menos el dos es primo pero me parecen de poco estilo. Cumplen con la necesidad pero no convencen.
¡Bueno! Probemos con las terminaciones en números primos: siete es primo y además semanal. Pero tendríamos que ajustar el periodo de publicación: siete y diecisiete son primos pero el veintisiete no. Aunque se podría establecer el veintinueve, finalmente son sólo dos días de desplazamiento. Pensemos en otras opciones sin olvidar estos. Los cinco, quince y veinticinco quedan descartados, primo sólo es el cinco.
Podemos pensar en publicar cada cierto rango de tiempo: puede ser que se publique cada siete a quince días. Sin una fecha fija pero sin salirse de los límites. Lo siento ambiguo.
Recuerdo que alguna vez me preguntaron si se podía saber qué boletos comprar para que los asientos de los autobuses fueran contiguos. Es decir, cuando te preguntan que número quieres, poder escoger dos asientos juntos sin necesidad de ver un dibujo del autobús. Eso es fácil: tienen que ser números consecutivos y el primero debe ser impar. Si se compran el quince y el dieciséis se tendrán dos asientos juntos. Al menos en los autobuses de cuatro asientos por fila.
Cuando son autobuses de tres asientos por fila se debe pensar en múltiplos de tres menos dos: los asientos uno (tres menos dos), cuatro (seis menos dos), siete (nueve menos dos) y son contiguos con sus siguientes. Entonces se compran los asientos uno y dos, cuatro y cinco, siete y ocho, etcétera.
¿Podrá servir esto para hacer una regla de publicación? Es algo complicado: de entrada se tienen que publicar dos días consecutivos. Entonces, definamos nuevamente las reglas: más de siete días entre publicaciones, menos de quince y una regla fácil de aprender.
Todo esto pasó por mi mente antes de definir las fechas de publicación y la invitación a un café de solsticio me dio la respuesta buscada: el veintiuno de diciembre podía ser un buen día para empezar. Si se hace cada diez días tendremos los días primero, once, veintiuno y treinta y uno. El último no siempre lo que pone interés a la serie porque no siempre lo hay y da la escusa para publicar dos días seguidos.
Es fácil de recordar porque todos los días terminan en uno. Me gusta porque al menos tres son números primos; el restante corresponde a equinoccios o solsticios: números simples en apariencia y complejos al estudiarlos.
Tal vez me complico mucho la vida, pero ésas fueron mis elucubraciones antes de decidir cuándo publicar el presente blog.
Escrito el 14 de Mayo de 2015.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario